Cualquiera que sea el sufrimiento que tengas en tu vida así sea sólo una molestia o algo grande tiene únicamente una razón de ser: algo que no estás aceptando. Lo único que nos genera sufrimiento a los seres humanos es la falta de aceptación.
Aceptar nunca será igual a resignarse, porque la resignación viene del miedo, de la debilidad, de la incomprensión, de la frustración.
Mientras que la aceptación viene de una profunda sensación de paz interior, a pesar de lo que este sucediendo en el exterior. Viene de comprender que detrás de todo siempre hay un propósito de amor, siempre hay un porqué y un para qué.
A nadie le llega una experiencia que no necesite o que no sea capaz de afrontar, todos tenemos una infinita fortaleza y sabiduría en nuestro interior, sólo se trata de empezar a hacer uso de ella.
Si algo te está generando algún tipo de molestia es porque no lo comprendes y si no lo comprendes no lo puedes aceptar, es allí donde se genera el sufrimiento.
Cuando comprendemos que todo en esta vida es lección ó bendición, y que detrás de cada lección también hay una bendición, empezaremos a entender el verdadero sentido y propósito de la existencia.
Aquí te comparto algunas de las mejores oportunidades de aprendizaje en la escuela de la vida:
Las crisis nos enseñan fortaleza.
Los desacuerdos nos enseñan aceptación.
Las diferencias nos enseñan tolerancia.
Las perdidas nos enseñan desapego.
Las ofensas nos enseñan perdón.
